miércoles, 20 de mayo de 2009

El lado oscuro del maravilloso circuito catalán


Ya llevamos unos años en los que nuestra esforzada Federació Catalana se empeña en potenciar más y más los torneos del Circuito Catalán. La idea es crear durante el verano una suerte de oasis ajedrecístico donde todos los jugadores del mundo, sean buenos o mejores, tratan de beber de nuestros caudalosos premios.

La idea puede que resulte atractiva ya que así todos tenemos la oportunidad de jugar con jugadores de fuera y eso siempre hace ilusión. Además el nivel medio sube al enfrentarse a todo un ejército de buscavidas del tablero.

Lo que me parece mal es que indirectamente fastidia al resto de torneos que aquí se organizan, principalmente en otras épocas del año. Los torneos del circuito catalán tienen preferencia a la hora de elegir fechas. Se da el caso, incluso, de que algún torneo del circuito fue capaz de expulsar de sus fechas -ya adjudicadas por la FCE- a un torneo más antiguo pero que no había entrado en el circuito. No daré nombres porque es un tema zanjado y para no liarla. Otro tema es que las subvenciones se priorizan extraordinariamente en función de si tu torneo está en el Circuito o no...

¿Conclusión? Que los clubes han abigarrado el verano de torneos y luego en otras fechas del año la oferta cojea. Si montas el torneo en verano a nueve días seguidos o, mejor aún, uno de semirràpidas que no te ate demasiados días, logras una inscripción brutal de titulados, te llegan más subvenciones porque impresionas a los políticos que no entienden de ajedrez, logras el apoyo federativo si hay disputas por fecha... En cambio, si lo montas en invierno sucede al contrario.

Ha habido momentos del año en los que en sábado mañana no había ningún torneo de lentas en una ciudad como Barcelona. Lo justo sería tratar a todos los torneos por igual, estén o no en el Circuit, y defender un poco más a los torneos de ronda semanal que son la auténtica esencia del ajedrez catalán. Si no, seremos como esos pueblos que se llenan de guiris en verano pero que luego, en invierno, dan pena. ¡Y no la quiero liar! Sólo es una opinión.

1 comentario:

Jordi Sabater dijo...

Crec que tens força raó. Que la fuerza nos acompañe...