Hoy me pasé por Sant Adrià con Javier Ríos para ver el open que organizan nuestros amables vecinos y, de paso, animar a Ricard Llerins y Nacho Abascal. Podría haber votado a primera hora pero pensé que aún tenía tiempo de hacerlo...
Ricard apenas ha gastado su tiempo y ha vencido con seis minutos más de reloj de los que tenía al inicio de su partida y eso que han llegado al final. Ricard tenía prisa para irse a visitar el museo de Badalona y ha puesto la directa, tanto, que casi entra en una variante de tablas, pero su rival ha caído en un truco y se ha dejado pieza en una clavada. No lo sé al detalle pero Ricard me ha comentado que pierde dos o tres puntitos de elo y caerá un puesto en la lista del por equipos, resultando beneficiado David Vivancos alias "imperioso", que sube un puesto en los 40 principales.
Abascal situó un caballazo en sexta y su rival entregó calidad para liberar su posición. El jugador de Sant Martí, con oficio, se limitó a buscar los cambios de piezas y su rival, tras gastar casi todo su tiempo, acabó por cometer errores decisivos. Abascal won.
Hubo partidas muy interesantes, especialmente, la bonita victoria de Ródenas -del Sant Adrià- contra Daimiel, de La Lira. Fue una orgía de desviaciones que culminó en jaque mate. Luego, la amable gente del Sant Adrià nos invitó a un café y allí hemos estado platicando alegremente sobre la actualidad bloguera del ajedrez catalán. Desde aquí quiero dar las gracias al Sant Adrià por su hospitalidad y les deseo mucha suerte en todo, ahora que sé que allí tengo lectores asiduos (!). Su nuevo local, que todavía no conocía, me ha parecido especialmente acogedor.
Más tarde Ríos y yo hemos ido a por Sabater -Vivancos no ha venido porque tenía otros compromisos, no sé si jupiterianos- y hemos acampado en un buffet libre japonés con platos giratorios. También venían Rosa y Ariadna, que hoy ensayaban danza del vientre. Excelente sushi el que sirven un poco más arriba de plaza Urquinaona, en serio, tenéis que probarlo. Luego ha seguido una exhibición de danza del vientre al atardecer a cargo de las dos bailarinas en las apacibles orillas del río Besós y más adelante nos hemos tomado un refresquito en una terraza para seguir hablando sobre acogedores clubes barceloneses.
Total, que cuando me he quedado solo, resulta que tenía el tiempo justo para votar y cuando he llegado a las 19:55 he descubierto con horror que me habían cambiado la sede electoral y he tenido que ir corriendo hasta el Centre Cívic de la Rambla Prim -mi nueva sede, justo donde se jugó el Social Diagonal Mar- para votar. He llegado corriendo, apartando casi a los guardias que querían cerrar el colegio electoral, y he podido votar. Por pelos. He sido el último en hacerlo pero otro día mejor no fuerzo tanto el reloj, no sea que pierda por bandera.
2 comentarios:
Ja, ja, que bueno, y yo que pensaba que ir a votar a las 19h era tarde.
No exagero, vaig entrar corrents al centre cívic, vaig baixar corrents la rampa, vaig derrapar per trobar la meva mesa i vaig presentar el carnet sense estar segur de si havia arribat a temps o no!!
M'alegro de tornar a tenir comentaris. Ultimament només els tinc de 43 en 43!
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