miércoles, 3 de noviembre de 2010

Magistral antitablas en Barcelona

He podido leer en el interesante blog de David Vigo las bases del duro torneo que se organiza en el Torneig MagistralCiutat de Barcelona - Casino de Barcelona y me he medio sorprendido al ver que se prohibe efectuar ofertas de tablas en las primeras 40 jugadas. Esto es una especie de Regla de Sofía a la catalana. Curiosamente, les dejan llegar 20 minutos tarde a la partida...
Si dije que me "medio" sorprendió es porque no es la primera vez que se aplica esto en torneos y porque la FCE -y otros- están empeñados en amputar las tablas del juego del ajedrez. Los participantes, lógicamente, se doblegarán a esta medida como en otras ocasiones he visto como les vestían de chino, les ponían boinas gigantes en la cocorota o hasta les hacían jugar a la ciega. Son mercenarios del ajedrez, proletarios del tablero que no pueden morder la mano que les alimenta. Lo mismo que cuando al niño Mozart lo exhibían por media Europa.
Afortunadamente, los jugadores amateurs somos más libres porque si no nos interesa la norma, no nos apuntamos al torneo y seguimos cobrando a final de mes. El problema será el día en que la FCE o la FIDE nos eche un pulso y definitivamente quiera imponer la prohibición de ofrecer tablas en su versión light (40 primeras jugadas) o la heavy (durante todo el juego).
Los argumentos que se esgrimen para cercenar las tablas del ajedrez pasan todos por que, si se obliga a continuar, se evitan las tablas de GM, como si eso fuera algo malo. Algunos organizadores, desoyendo a Quevedo, consideran que una partida breve es nefasta. Como si la gente -haya pagado o no por la entrada- quisiera ver muchas jugadas en el tablero. Como si no fuera nefasto ver jugar a dos personas una posición insulsa. Una caca porque sea más larga o más grande no deja de ser una caca, ¿verdad? De hecho, la mayoría de la gente suele preferir mirar partidas breves a largas, especialmente si son miniaturas. Si en un torneo finaliza alguna partida breve, el público mirará las otras y ya está. Además, si alguien resulta poco atractivo por estilo o duración a la organización pues se arriesga a no ser invitado el año próximo. No hace falta que se prohiba por reglamento, que la gente ya es mayorcita y sabe lo que hace.
Otro argumento suele aludir a que el ajedrez, en tanto que deporte -premisa discutible pero no atacaremos por ahí-, siempre necesita un ganador. Como si el ajedrez fuera un partido de tenis o voleibol. Este argumento es fácilmente rebatible porque hay muchos deportes donde también se contempla el empate final, como el fútbol, aunque es cierto que la regla de los 3 puntos por victoria ha prostituido el fútbol, obligando a jugar ofensivo para poder poner más goles en el resumen de los partidos.
El otro gran argumento es que al tener que ganar, aumenta el espectáculo y la gente juega más agresivo y todo el mundo se lo pasa mejor -salvo los sufrientes jugadores, claro-. Ya podemos tirar a la basura a Capablanca, Petrosian... Esto es sencillamente una majadería porque los amantes del ajedrez pueden apreciar por igual una partida llena de sacrificios arriesgados y otra de fino carácter posicional con posiciones muy muy igualadas.
Prohibir el empate es como prohibir salir de dama aludiendo que la gente se aburre más. Es modificar el ajedrez, que deja de ser ajedrez. Si los participantes combinan los jaques con el boxeo y se lían a tortas saldremos en los periódicos pero asesinando el juego y cambiándolo por otro.


7 comentarios:

Alejandro Darias Mateos dijo...

Yo hace años me prohibí personalmente pedir tablas en cualquier partida. ¿El resultado? Más victorias y más derrotas, pero indudablemente el porcentaje de puntos ganados aumentó.

Yo no veo nada mal la versión light de prohibir tablas (30-40 jugadas), de hecho, estoy convencido que jugar esas posiciones insulsas hasta que no les puedas sacar más jugo son una buena manera de aprender, aunque luego se pierda.

Unknown dijo...

Comprendo tu postura pero creo que debería seguir siendo opcional la combatividad en un juego que por reglamento permite las tablas de mutuo acuerdo.
Es como lo de dar la mano al rival. Está bien que sea opcional. Imponerlo le resta importancia al gesto.

Unknown dijo...

Además, Álex, puede ocurrir que alguien tenga suficiente con unas tablas. Alguien que ya ha hecho los deberes en otras partidas, que tiene menos puntos elo y le interesa empatar...

Unknown dijo...

Si quieren lucha y espectáculo podrían prohibir también el enroque, seguro que veríamos más ataques de mate y menos acoso y derribo al peón débil.
A alguien le parecerá ridículo y exagerado. Bueno, a mí me parece ridículo y exagerado tener que pedir permiso al árbitro, que habitualmente no sabe, para dejar de continuar una posición sin opciones o hacer el tonto durante X jugadas hasta llegar al número mágico.
Hace unos años, en un cerrado que montaba EDAMI, en las tres últimas rondas estaba prohibido hacer tablas en menos de 40 jugadas (salvo los casos reglamentarios) porque se jugaba en Cosmocaixa con público y comentarios. Recuerdo los ataques, a ratos de risa y a ratos de vergüenza ajena, que me daba estar contemplando junto a Dani Almeida cómo Illescas y José González perdían horas de su vida moviendo de un lado a otro hasta que la jugada 40 les liberó de tal engorro. ESO sí me parece una falta de respeto al ajedrez y a la competición.
Si a alguien, como a Alex, no le gustan las tablas, pues que no las haga, pero las federaciones que dejen a la gente elegir. A ver cuándo se proponen evitar la compraventa de puntos en vez de los acuerdos de tablas, por bellas y espectaculares que sean en ocasiones las derrotas pactadas.

DAVIDVIGO dijo...

Jo trobo que les taules són un resultat més que és pot donar en una partida d'escacs, i de vegades poden ser útils, sobretot si has complert els objectius del torneig, o portes tres partides al límit i estàs cansat doncs a la quarta partida pot ser t'interessa no forçar la màquina, o amb taules guanyes el torneig, etc.
Si el reglament no ho prohibeix és absurd possar-ho a les bases. El que si és prohibeix és pre-acordar el resultat abans de jugar.

Unknown dijo...

Patty, estoy de acuerdo contigo. ¡Qué raro! Alargar artificialmente una partida puede ser peor que entablarla prematuramente.
También estoy de acuerdo en que cuando la cosa depende del criterio arbitral ya podemos echarnos a temblar. No es el primer árbitro 1800 que tiene que decidir si dos GM especulan o no...

Unknown dijo...

Mira, un ejemplo reciente del torneo de Barcelona. En la partida Oms vs Alsina llegan a un final de evidentes tablas con A+2 peones por bando y tienen que ir moviendo los alfiles para la triple repetición. Claro, no podían dejarlo en tablas porque no habían llegado a la 40...