Cuando uno cambia de club suele arrastrar secuelas emocionales al tener que enfrentarse a su antiguo club. Al menos eso me ocurre a mi. Pero si encima tiene que enfrentarse al que fue su equipo durante muchos años entonces la cosa es todavía más grave.
Disputé 14 temporadas con el Colón, principalmente, con el Colón B, el equipo al que me enfrentaré el próximo domingo. Llegué a ser incluso el delegado del Colón B y ahora me tengo que enfrentar a mis antiguos compañeros de armas (Godesard, Arza..). Saben lo que juego y yo sé lo que juegan ellos pero eso no es lo fundamental. El tema es que en ocasiones así uno pierde seguro. No me refiero a mi partida -hace dos años ya jugué contra ellos y entablé con Sílvia Folch- sinó a la sensación agridulce que producirá cualquier resultado. Si gana el SMA B estaré feliz por la victoria pero triste por hundir un poquito más al Colón B. Si perdemos contra ellos, lógicamente no me gustará porque perder siempre fastidia y, si empatamos, mal para ambos clubes.
Hay jugadores que optan por no jugar contra sus antiguos clubes. Es una decisión respetable pero yo no la comparto porque eso, en mi opinión, es dejar en la estacada a tus actuales compañeros. Priorizar el club en el que ya no militas me parece, cuanto menos, contradictorio porque si te fuiste fue para cambiar el chip y con todas sus consecuencias. Yo prefiero jugar y luchar a muerte el punto, aunque sea contra mi exclub y mis amigos -no examigos- porque aunque deje un saborcillo amargo, como mínimo tendré una excusa para volver a pisar el Colón un domingo de por equipos.
Este año el match parece estar un poco a favor del Sant Martí B si tenemos en cuenta las bajas que está presentando el Colón B pero nunca puede adelantarse un resultado y más si es en un derby. Seguro que en el Colón ya están tramando presentar su equipo de gala -como debe ser- para demostrar lo que vale un peine. Será un domingo muy especial.
Disputé 14 temporadas con el Colón, principalmente, con el Colón B, el equipo al que me enfrentaré el próximo domingo. Llegué a ser incluso el delegado del Colón B y ahora me tengo que enfrentar a mis antiguos compañeros de armas (Godesard, Arza..). Saben lo que juego y yo sé lo que juegan ellos pero eso no es lo fundamental. El tema es que en ocasiones así uno pierde seguro. No me refiero a mi partida -hace dos años ya jugué contra ellos y entablé con Sílvia Folch- sinó a la sensación agridulce que producirá cualquier resultado. Si gana el SMA B estaré feliz por la victoria pero triste por hundir un poquito más al Colón B. Si perdemos contra ellos, lógicamente no me gustará porque perder siempre fastidia y, si empatamos, mal para ambos clubes.
Hay jugadores que optan por no jugar contra sus antiguos clubes. Es una decisión respetable pero yo no la comparto porque eso, en mi opinión, es dejar en la estacada a tus actuales compañeros. Priorizar el club en el que ya no militas me parece, cuanto menos, contradictorio porque si te fuiste fue para cambiar el chip y con todas sus consecuencias. Yo prefiero jugar y luchar a muerte el punto, aunque sea contra mi exclub y mis amigos -no examigos- porque aunque deje un saborcillo amargo, como mínimo tendré una excusa para volver a pisar el Colón un domingo de por equipos.
Este año el match parece estar un poco a favor del Sant Martí B si tenemos en cuenta las bajas que está presentando el Colón B pero nunca puede adelantarse un resultado y más si es en un derby. Seguro que en el Colón ya están tramando presentar su equipo de gala -como debe ser- para demostrar lo que vale un peine. Será un domingo muy especial.
1 comentario:
Suerte para el Colón en el por equipos. Pero el domingo no, je, je. Un abrazo.
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