El Colón, asediado por okupas

El pasado domingo fui a disputar el encuentro del por equipos en el Ateneu Colón -en Pujades- y se confirmaron mis peores temores. Me lo habían contado pero pensé que igual era una exageración...

Al llegar al Ateneu vi un montón de latas -de cerveza, cómo no- esparcidas por toda la acera y, en el portal de al lado, una horda de jóvenes trasnochadores de estética anarko-okupa. Ambos grupos -los ajedrecistas y los okupas- nos miramos con curiosidad y pensando: "éstos sí que son raros, raros...". Entramos y pudimos comprobar que el ruido en la sala de al lado era considerable aunque no molestaba para jugar. Tuvimos suerte porque, por lo visto, la semana pasada sí que hubo ruido de verdad y alguien tuvo que avisar a las autoridades.

La invasión okupa, que se adivina inminente. no hace sinó aumentar las ganas de los coloneros por emigrar a nuevas latitudes, más tranquilas, donde poder practicar en silencio el noble juego de reyes. Es una lástima que un club tan majo tenga que lidiar con estos temas, la verdad.

El episodio es nuevo pero no el tema. Desde hace muchos años, incluso en la antigua sede del Ateneu -en Pedro IV- ya había habido altercados con jóvenes trasnochadores que armaban jaleo en la pista de baile. Cabe recordar que antes del baile de tercera edad hubo actividades discotequeras en el venerable local del Ateneu. Haber, haber, había incluso timbas de cartas pero afortunadamente esto forma parte del pasado remoto de una entidad centenaria. La cuestión es si esto quedará como otra anécdota más o se instalará como problema permanente en la sede actual del Colón. Esperemos que no...