Esta semana tampoco hubo milagro. El Tordera se impuso por un claro 7 a 3 en su feudo, en parte, gracias a su superioridad "elística" en todos tableros. Cabe añadir que fueron unos buenos anfitriones y tuvieron el detalle de no pulsar los relojes hasta que todos nuestros jugadores llegaron a la sala de juego y advirtieron que si le sonaba el móvil a alguien no reclamarían. Puede que alguien considere esto una tontería pero para mi es un detalle de humanidad y de afición sana a este juego que no se ve en todas partes así que les felicito por su triunfo pero ante todo por su actitud desinteresada.
El Sant Martí B llegó con una caravana de cuatro coches a lo París-Dakar. Ariadna Moreno actuaba como guía local, pues ella, aunque santmartinense, es natural de Tordera y antigua jugadora del Tordera.
Formaban el equipo David Vivancos, Fontanillas, Riera, Sabater, Dani Porras, Pascual, Rojas, Gómez, Poyato y Sandra Escobar. La alineación no era la de las últimas dos semanas pero los fichares estelares de esta semana hicieron un papel muy digno.
En cuanto al match, el Tordera fue muy efectivo en los primeros tableros. Vivancos entró en una partida muy igualada frente a un 2300 largo pero tenía tres islas de peones (2+2+2) y su rival sólo 2 (3+3) y el jugador local acabó imponiéndose con paciencia sibilina. Fontanillas hizo un experimento en la apertura y quedó peor. Su rival ganó calidad pese a tener tres piezas tocadas y se anotó el punto con relativa facilidad. Manel logró tablas en una partida bastante igualada y Jordi Sabater perdió ante otro rival duro (2190 más o menos). Dani Porras se enzarzó en un prefinal de damas y torres muy igualado que, según Dani, estaba un poco peór para él pero pudo arañar el empate. Por la zona de arriba el Tordera obtenía 4 puntos de 5 posibles.
En los siguientes tableros, el Sant Martí logró algo más de puntuación pero fue insuficiente para obtener un resultado positivo. Pascual perdió material decisivo y, pese a que lo intentó, sucumbió sin poder remediarlo. Rojas volvió a empatar tras aceptar una oferta de tablas (y ya van tres empates) aunque él mismo reconocía que si hubiera tenido la posición de su rival habría intentado ganar. Gómez perdió relativamente pronto. Perdió un peón y su rey quedó en una posición muy abierta que acabó en magnicidio. Poyato fue el héroe del día. Su partida se encaminaba a las tablas, Fernando iba a proponerlas cuando su rival cometió un error grave y el santmartinense pudo ganar la única partida del match. Por último, Sandra Escobar se estrenaba en el B y amarró unas tablas bastante luchadas. En total, perdimos 7 a 3. Más o menos todos vamos puntuando pero nunca en la misma ronda, jeje.
Tras el ajedrez llegó el plato fuerte del día, el auténtico motivo de la excursión, y nos fuimos a comer a Can Casellas, un restaurante torderense en el que nos hicieron esperar un poco los platos pero donde se comió opíparamente. Como sentenciaba David Vivancos al final del ágape, fue una comida digna del A...