Aprovechando que este domingo Jordi y yo estuvimos en el Colón para disfrutar de la clase magistral (ahí tenéis la foto), preguntamos a Joan Lorda, su presidente, por el Social del Colón y éste nos dijo que la edición del 2009 se jugaría en fechas similares a las de este año, es decir, enero y febrero.
A petición nuestra, Lorda consideró la posibilidad de recuperar el desaparecido Social Activo del Colón y dijo que ya pensaría algo aunque dejó entrever que intentaría celebrarlo en un par de días y que posiblemente sería los viernes por la noche, como el Social de lentas.
El Ateneu Colón es un club con un largo historial deportivo. ¡Algunas de las naftalínicas copas que allí se exhiben se remontan a los años 40! Recientemente han recuperado la máxima categoría catalana -la tan deseada DH- con un equipo semiprofesional y algunos de sus niños vuelven a ganar en los torneos escolares. Desafortunadamente, el Ateneo Colón tiene todavía una asignatura pendiente: devolver a sus torneos sociales el esplendor que antaño tuvieron. Como un ancianito que poco a poco pierde su vitalidad, el Ateneu ha ido apagando su fervor socialero y la inscripción de esos torneos ha ido menguando en cantidad y calidad.
Esta crisis de los sociales no afecta únicamente al Colón. La amplia oferta de abiertos y la posibilidad de jugar partidas por Internet ha reducido el interés de los jugadores en jugar torneos que no cuentan para el elo. No obstante, hay clubs -como el Sant Martí- que todavía cuentan con un Social fuerte y consolidado. Esto quiere decir que no hay que culpar tanto a los opens ni a Internet. ¿Dónde está la causa, entonces? Pues seguramente es cuestión de dignificar el torneo.
En primer lugar, un Social debe tener prestigio y, si no lo tiene, se le debe buscar ese prestigio. Debe estar numerada su edición y recopiladas las clasificaciones de cada una de las ediciones. Así mejorará año tras año. Un Social puede ser muy antiguo pero si no se recuerda quién lo ganó en un determinado año se le está restado importancia al hecho de ganarlo. Debe fomentarse la memoria histórica. Recordar de vez en cuando quién lo ganó fomenta las ganas de ganarlo o de quedar bien clasificado. En el caso del Colón no hay esa memoria histórica. Cuando yo estaba allí, traté de hacerlo y recuperé -con ayuda de mucha gente- un montón de resultados que se remontaban a los años 70 pero luego esos datos quedaron olvidados en la página web del Colón sin que nadie los utilizara y, cuando la web explotó, todo eso se perdió. Quizá sería el momento de recuperar esa inicativa pero ya no me corresponde a mi tomarla. Recuperar el palmarés, buscar qué edición fue la primera y numerar todas las ediciones disputadas hasta el día de hoy. Yo he hecho esto en el Social Besòs y creedme que ha supuesto un gran lavado de imagen para un torneo que llega a su edición XV. Imagináos qué prestigio adquiriría un torneo como el del Colón, que debe rondar como mínimo las XL ediciones. Pensad que el Colón se fundó a finales de los 60 -hace 40 años, más o menos-...
Otro factor decisivo es que la competición debe jugarse cuando le vaya bien a la mayoría de jugadores potenciales, los del club. No diré aquí cuándo debe jugarse pero es importante que sea un horario accesible tanto para los que trabajan como para los más pequeños. Lógicamente, en fin de semana y horario diurno. Si, por una razón u otra, no respetamos esto, estamos menguando la participación. Tengamos presente que un Social cohesiona a los miembros de un club. Es importante que los más pequeños puedan jugarlo porque así se relacionan con los mayores y amplian el mundillo de los campeonatos escolares. Es importante que vean que hay vida más allá de los escolares. En caso contrario, abandonarán el ajedrez cuando dejen de ser sub-algo. Si el Social se juega por la noche, como en el Colón, habrá cero niños jugándolo y crecerán sin la ilusión de jugarlo.
Creo que si se respetan estos consejos, cualquier Social gozará de una salud acorde con el nivel deportivo de la entidad -si el club es pequeñito, no esperemos un open de 50 jugadores-. Un profesional no acudirá a los Sociales -pues no hay dinerillo- pero el 99% de los jugadores, que es amateur, debería tener suficiente motivación en este tipo de campeonatos al lado de casa donde una sana rivalidad entre compañeros de club -o de distrito- es la que nos impulsa a jugar.
No quiero dar lecciones a nadie -porque no estoy en situación de darlas- pero sí expresar una opinión meditada durante muchos años de observación de los distintos sociales de la zona y, si escribo esto es porque me duele ver el declive de ciertos torneos que, en mi niñez, fueron míticos.
8 comentarios:
Pues es un árduo trabajo recueprar tanto dato.
Pero si estoy contigo en que sin la memoria histórica, se pierde valor, glamour y renombre. Siempre hay altibajos en un campeonato, pero con voluntad se remonta.
Eso sí, sin gente que se lo curre hay muchas posibilidades de que se pierda con el tiempo. Suerte que por el St. Martí aún tenemos algunos que casi trabajan a tiempo total para el club de forma desinteresada.
Monpablo: por suerte en el Sant Martí , Ricard no está sólo. A ver si alguien más viene a las 4 los sábados a poner piezas, en lugar de dejarme cargar a mi sólo con ellas. Catulo: Excelente. Mejor no se puede explicar. Y no te preocupes por si alguien se podía sentir "herido" por tus consejos bienintencionados y fundamentados. Muchos de ellos pasan del olímpicamente del Colón, no tienen energía para ello pues ya la gastaron para silbarte a pesar de lo mucho que tú sí trabajaste para ellos. Ja s'ho farán.
Bueno, fueron unos silbidos y abucheos bienintencionados, cariñosos... Supongo que no contaba el haber hecho clases, haber perdido algún finde haciendo de entrenador, 14 temporadas como jugador, algunas de ellas como delegado del B, ayudar en la organización del open veraniego, que mi padre hubiera diseñado el escudo de la entidad, actualizar la web regularmente...
Pese al feo que (algunos) me hicieron todavía conservo una buena amistad con muchos de ellos y deseo la mejor de las suertes a la entidad colonera. Eso sí, espero que no me (nos) silben cuando recojamos la tripleta de premios del Social 2008!!!
Sobre la reconstrucción del palmarés del Colón, creo que puede hacerse -intentaré avanzar algo en ese terreno- pero es fundamental que muchos de los veteranos, como Prados, rescatasen datos del olvido.
Un escrito excelente. Bravo.
Te puedo adelantar que en el año 1989, 1993, 2002 y 2006 el social del COLÓN lo ganó Luis Sánchez. AUNQUE EL PODRÁ RECONFIRMARLO.
Veo que en el 2002 pones de campeon a Piñero, pero según los datos del historial que tengo de Luis (hecho y donado a mis archivos por el mismo), el también lo ganó ese año, algo no cuadra, jejeje.
ese abnonimo era yo que se me escapo el ratón
ok miraré de añadir esos datos, quizá esa disonancia del 2000 se deba a que en cierto momento se modificó el concepto de temporada antes era 93/94... y ahora se cuentan por años naturales. También podría ser que ese dato piñeril, que saba me dio de memoria, esté equivocado de un año. Cualquier dato que recuperéis respecto a campeones ya me lo diréis que es bienvenido, gracias monpablo!!!
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