El Club Escacs Hostalric ha pintado sus paredes, que pasan de color crema con dibujos infantiles a color crema sin dibujos infantiles. Ahora la sensación es mucho más relajante. Las paredes, auténtico muro de las lamentaciones, han complicado las cosas al equipo de pintores, encabezado por los hermanos Cobos, y tras varias intentonas de pintar el local de color blanco se ha optado por un color crema que disimulara la correosa decoración anterior, que persistía en reaparecer tras interminables capas de pintura.
Lo que ahora se pregunta la gente es si la pared volverá a hacer de las suyas y volverá a presentar Caras de Bélmez o se dejará domar definitivamente...
Se están reordenando los espacios y tratando de que la sala pueda albergar más partidas de cara al próximo evento que organizará el club, el 7 de julio, junto al Club d'Escacs Sant Martí i el Llinars del Vallès en lo que será un torneo triangular de partidas a 90' finish.
El local incluirá fotografías de campeones mundiales para decorar la sala de juego, entre otras cosas.
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