He pescado algunas críticas (buenas y no tan buenas) que se han publicado no hace mucho sobre el Open del Sant Martí que se organiza en verano. Para no alimentar a los buitres, transcribo las críticas pero sin poner el nombre de quien las escribe para centrarnos en lo que dice y no tanto en quién lo dice.
Opinión 1:
Al hilo de lo que leo en la página (ND) y que a muchos nos molesta y nos da que pensar, me gustaría reflexionar un poco.
Durante el verano se juegan un gran número de torneos en los que participan un gran número de jugadores extranjeros, algunos de ellos sin ELO de ningún tipo.
Cómo todos podremos observar en las clasificaciones finales de los torneos, hay jugadores "sin" ELO a los que se les asigna un 1700, un 2000 (en los casos de algunos jugadores que van juntitos y vienen desde África a llevarse los premios arrasando "sin" ELO a jugadores que pagan una inscripción promedio de 30 euros) o un ELO simbólico.
Además, se da otro fenómeno que, en mi opinión, debería tenerse en cuenta, pues es fuertemente discriminatorio y, además, desvirtúa la competición.
Independientemente de lo que suceda en un torneo, a mí, personalmente me motiva jugar, pasarlo bien y aprender. Obviamente, obtener un premio por tramo es un aliciente que, no negaré, es bienvenido. Eso sí, cuando hay posibilidades de obtenerlo, siendo un modesto jugador con menos de 1800 de ELO Catalán.
Yo sólo he jugado dos torneos del Circuit, el de Sant Martí y el de Badalona.
En ambos casos, y al ranking y a la clasificación me remito se dan situaciones, cuanto menos, que dan que pensar.
Entiendo que, cuando sólo hay grupo A y B, muchos jugadores, con ELO catalán por encima de 2000, pero FIDE inferior, quieran jugar en el grupo B pero se dan situaciones de manifiesta injusticia por los diferenciales de ELO con más de la mitad de los jugadores que, pagando una inscripción igual, ven menguadas sus posibilidades de obtener algún premio ya que suele haber un par de premios para los "mejores hasta ELO 1850" y basta. Esos premios los suelen copar jugadores con ELO catalán cercano a 2000, ya que, lógicamente, los otros jugadores con ELO superior a 2000 acaban, indefectiblemente, la mayoría en las primeras posiciones.
Mención aparte los jugadores extranjeros, tema que, humildemente, debería regularse un poco más. No hace falta dar nombres ni nacionalidades pero todos hemos visto pasearse por estos y otros torneos a jugadores que, con un ELO "inexistente" o ficticio, juegan a niveles de 2200, 2300 y, en un caso, casi 2400, motivo que, con gran acierto, hizo que, en Badalona, hicieran jugar a uno de esos "tapados" en el duro grupo A donde, por cierto, lleva 4,5 puntos. Sólo hay que ver los jugadores con los que ha empatado o a los que ha ganado, para entender que, en Sant Martí, ese jugador no debería haber jugado en el grupo B donde obtuvo "sólo" 8,5 de 9 posibles.
Imagino que no es fácil y menos en torneos encuadrados dentro del Circuit, pero creo que los organizadores de cada torneo deberían pensar no sólo en los GM, MI, FM, etc.. del grupo A y en los fuertes jugadores que también integran el grupo B de cada torneo. Hay una masa silenciosa, modesta, entusiasta y aficionada de jugadores con un ELO, digamos que hasta 1900 catalán que disfruta jugando los torneos, que paga religiosamente una pasta por cada uno de ellos, que llega de trabajar sacando la lengua sin comer o malcomiendo (me consta que muchos lo hacemos asi), para pasar un buen rato y, a pesar de conseguir, algunos, puntuaciones meritorias para su ELO, no rascan bola.
Quizá la solución pasaría, o por hacer un grupo C cómo hacen algunos torneos, con buen criterio, donde el ELO catalán máximo sea 1850 o 1900, o establecer más premios para los jugadores con ELO inferior que, dicho sea de paso, también existen.
Un saludo y feliz verano.
Opinión 2:
La de este año ha sido mi segunda participación en el torneo de Verano del C.E. Sant Martí. La primera fue el año pasado. En las dos he tenido el placer de tomar parte de un evento bien organizado, y que aparte de mostrar una trayectoria claramente ascendente en aspectos como los que destaca Ricard Llerins, es un clarísimo ejemplo de lo que es el genuino trabajo de club en su versión más auténtica. Y eso es probablemente lo más importante. Aparte de que suele ir de la mano, como es el caso, de algo tan fundamental como es aquello de "hacer cantera".
En el Sant Martí todo esto no es novedad, viene ya de años, para orgullo de sus entusiastas asociados y satisfacción de los que podemos disfrutar de tomar parte en torneos como el citado.
Mi más sincera enhorabuena, y a seguir mejorando.
Opinión 1:
Al hilo de lo que leo en la página (ND) y que a muchos nos molesta y nos da que pensar, me gustaría reflexionar un poco.
Durante el verano se juegan un gran número de torneos en los que participan un gran número de jugadores extranjeros, algunos de ellos sin ELO de ningún tipo.
Cómo todos podremos observar en las clasificaciones finales de los torneos, hay jugadores "sin" ELO a los que se les asigna un 1700, un 2000 (en los casos de algunos jugadores que van juntitos y vienen desde África a llevarse los premios arrasando "sin" ELO a jugadores que pagan una inscripción promedio de 30 euros) o un ELO simbólico.
Además, se da otro fenómeno que, en mi opinión, debería tenerse en cuenta, pues es fuertemente discriminatorio y, además, desvirtúa la competición.
Independientemente de lo que suceda en un torneo, a mí, personalmente me motiva jugar, pasarlo bien y aprender. Obviamente, obtener un premio por tramo es un aliciente que, no negaré, es bienvenido. Eso sí, cuando hay posibilidades de obtenerlo, siendo un modesto jugador con menos de 1800 de ELO Catalán.
Yo sólo he jugado dos torneos del Circuit, el de Sant Martí y el de Badalona.
En ambos casos, y al ranking y a la clasificación me remito se dan situaciones, cuanto menos, que dan que pensar.
Entiendo que, cuando sólo hay grupo A y B, muchos jugadores, con ELO catalán por encima de 2000, pero FIDE inferior, quieran jugar en el grupo B pero se dan situaciones de manifiesta injusticia por los diferenciales de ELO con más de la mitad de los jugadores que, pagando una inscripción igual, ven menguadas sus posibilidades de obtener algún premio ya que suele haber un par de premios para los "mejores hasta ELO 1850" y basta. Esos premios los suelen copar jugadores con ELO catalán cercano a 2000, ya que, lógicamente, los otros jugadores con ELO superior a 2000 acaban, indefectiblemente, la mayoría en las primeras posiciones.
Mención aparte los jugadores extranjeros, tema que, humildemente, debería regularse un poco más. No hace falta dar nombres ni nacionalidades pero todos hemos visto pasearse por estos y otros torneos a jugadores que, con un ELO "inexistente" o ficticio, juegan a niveles de 2200, 2300 y, en un caso, casi 2400, motivo que, con gran acierto, hizo que, en Badalona, hicieran jugar a uno de esos "tapados" en el duro grupo A donde, por cierto, lleva 4,5 puntos. Sólo hay que ver los jugadores con los que ha empatado o a los que ha ganado, para entender que, en Sant Martí, ese jugador no debería haber jugado en el grupo B donde obtuvo "sólo" 8,5 de 9 posibles.
Imagino que no es fácil y menos en torneos encuadrados dentro del Circuit, pero creo que los organizadores de cada torneo deberían pensar no sólo en los GM, MI, FM, etc.. del grupo A y en los fuertes jugadores que también integran el grupo B de cada torneo. Hay una masa silenciosa, modesta, entusiasta y aficionada de jugadores con un ELO, digamos que hasta 1900 catalán que disfruta jugando los torneos, que paga religiosamente una pasta por cada uno de ellos, que llega de trabajar sacando la lengua sin comer o malcomiendo (me consta que muchos lo hacemos asi), para pasar un buen rato y, a pesar de conseguir, algunos, puntuaciones meritorias para su ELO, no rascan bola.
Quizá la solución pasaría, o por hacer un grupo C cómo hacen algunos torneos, con buen criterio, donde el ELO catalán máximo sea 1850 o 1900, o establecer más premios para los jugadores con ELO inferior que, dicho sea de paso, también existen.
Un saludo y feliz verano.
Opinión 2:
La de este año ha sido mi segunda participación en el torneo de Verano del C.E. Sant Martí. La primera fue el año pasado. En las dos he tenido el placer de tomar parte de un evento bien organizado, y que aparte de mostrar una trayectoria claramente ascendente en aspectos como los que destaca Ricard Llerins, es un clarísimo ejemplo de lo que es el genuino trabajo de club en su versión más auténtica. Y eso es probablemente lo más importante. Aparte de que suele ir de la mano, como es el caso, de algo tan fundamental como es aquello de "hacer cantera".
En el Sant Martí todo esto no es novedad, viene ya de años, para orgullo de sus entusiastas asociados y satisfacción de los que podemos disfrutar de tomar parte en torneos como el citado.
Mi más sincera enhorabuena, y a seguir mejorando.
5 comentarios:
Me parece increíble que escriba esto, aqui hay un tio que tiene 1800 y quiere premios.
Si quiere ganar premio que estudie y llegue a 2400 , porque ésta es la ente que debe ganar los premios gente que se ha dedicado horas y horas , los demás solo podemos envidiarles sanamente o estudiar y alcnzarlos.
Personalmente, nunca me han hecho mucha gracias los premios "sub". Lo veo bien para niños, por ejemplo, porque funcionan a base de caramelos. Pero en adultos la gente debería marcarse el jugar por el mero disfrute del juego o marcarse retos personales e irlos superando.
otra opinion de un jugador en la pagina de su club enlace http://www.escacsmollet.com/index.php?option=com_content&task=view&id=651&Itemid=53
es esta
En el grupo B, 93 participantes tomaron parte en las 9 rondas de esta edición, configurando un fortísimo grupo, desequilibrado por el sistema de admisión basado en el ELO FIDE. Esto, condicionado o no por la normativa del Circuit Català, debiera ser corregido o tenido en cuenta por la organización, pues jugadores con un ELO FIDE bajo o inexistente por no jugar torneos que computan para tal, participaron con "ventaja" con ELO catalán muy superior. Imagino que, como hacen en otros torneos, es más "justo" que haya 3 grupos, o poner unos premios para jugadores con ELO catalán entre 1700 y 1800, por ejemplo, y entre 1800 y 1900. Muchos modestos jugadores con ELO catalán hasta 1850, han peleado por sacar 4 o 5 puntos que, con otro sistema de premios, les hubiera dado alguna alegria.
En cuanto al torneo, hay un aspecto terrible y que, a pesar de la buena voluntad del Club Escacs Sant Martí y las posibles justificaciones, no tiene perdón. Por mucho que lo pasado, pasado esté, ha sido un infierno. El propio Luis Rojas lo pasó mal en muchos momentos y, como el resto de los molletenses, levantándose a cada momento para beber algo, tomar el aire o acercarse al aire acondicionado portátil que era el único punto decente de la sala debido al (insoportable) calor en la sala de juego. Se ha jugado muy a disgusto por el calor. El hecho de que el aire acondicionado no estuviese listo para el torneo ha sido una lacra. No sabemos que dirá la Federació Catalana d'Escacs, pero un Torneo Internacional, no puede ni debe jugarse en esas condiciones. El año próximo prometen que habrá aire acondicionado. Menos mal. Más de uno ya no jugará, por si acaso.
es el mismo de la opinion 1
opinar los demas
Yo soy de los que prefieren jugar fresquitos, pero a veces hay imponderables que van más allá de la organización.
La gente paga una inscripción y hace bien en exigir ciertas condiciones de juego pero a veces, por inexperiencia, se piensan que montar un torneo es coser y cantar.
En cualquier caso hay libertad para inscribirse o no y el que no quiera jugar en Sant Martí por esas fechas puede aprovechar para ir a la playa o viajar muchos kilómetros hasta el open más próximo.
Es evidente que jugar en situaciones frescas es mucho mejor que hacerlo con un calor exagerado. Estamos de acuerdo que fue un infierno jugar esos días, pero responsabilizar a la organización que coincida una ola de calor africano en los días del torneo, me parece cuanto menos exagerado.
Yo repetiré el año próximo porque como torneo es una gran ventaja tenerlo en Barcelona ciudad en esas fechas y porque el aire acondicionado estaba casi instalado y supongo que en un año acabarán de instalar. Asi que si unimos el frescor del aire a lo que me parecio una muy buena organización, fechas y lugar de juego, allí estaré seguro. Quien no se acuerda de esos Badalona de antaño o de otros torneos que en otras ediciones jugaban en pabellones deportivos bajo techos que incrementaban la sensación termica y todos seguiamos jugando año tras año.
Las configuraciones de los grupos creo que es algo que corresponde a la Federación o al Circuito establecer unos baremos más justos y en todo caso a los árbitros cuando configuran los grupos. Yo diria que es algo que escapa a los clubes organizadores.
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